domingo, 18 de agosto de 2013

¡Dale a la vida más de lo que te da!







"Como una hermosa flor llena de color pero sin aroma, así son las palabras bonitas pero inútiles de quien no actúa de acuerdo con lo que dice" 







De la misma manera, ocurre todo lo contrario cuando -afortunadamente- tienes la oportunidad de conocer a gente que actúa de acuerdo con lo que dice, piensa y siente. El pasado mes de julio me ha hecho reflexionar mucho y, como acostumbra a pasar, cuanto más reflexionas más dudas te surgen en tus pensamientos. Y hay una duda que lleva tiempo dándome vueltas por la cabeza, lo más absurdo es que deja de ser duda cuando sin darme cuenta soy yo misma quien me la respondo. 


¿Cómo es posible que siendo de la misma especie, tengamos un punto de vista tan distinto de la vida? Me refiero a un punto de vista de la vida mucho más básico y simple, el de los sentimientos hacia la propia vida, la naturaleza. No entra -o no quiere entrar- en mi mente que sea posible que haya gente tan insensible con ella. Sea árbol, sea roca, sea insecto o sea gran mamífero. La respuesta a mi pregunta formulada es que es posible y solo depende de la educación. Te puede gustar más o te puede gustar menos, pero la sensibilidad de una persona hacia los seres vivos y hacia la naturaleza no es punto que se deba cuestionar. Esa sensibilidad es necesaria y su carencia es lo que nos ha llevado a la situación mundial actual. La ignorancia y la falta de preocupación por aprender de ella ha llevado a mucha gente a vivir en una auténtica burbuja.



A ver si alguien me puede responder a las siguientes preguntas: 










Parece que si no es a base de malas experiencias no aprendemos. 



No debería hacer falta ver ingresar en AMUS este pollo de cigüeña agonizando, enredado en plásticos, para ser conscientes de la gravedad de la situación actual pero... me gustaría saber si ¿es posible que alguien, incluso viendo el pobre animal de la fotografía, siga siendo capaz de dejar plásticos y residuos tirados en el campo? 



Lo que más siento no es pena, es mucha rabia. 








Este pollo de águila calzada estaba en casa de un particular el cuál lo llamaba "Paquito". Debido a su ignorancia tuvo que ser eutanasiado nada más ingresar en el centro de AMUS ya que sus huesos se habían vuelto de plastilina por la malnutrición que había recibido. ¿Que la intención de los particulares era buena? Lo dudo. 

Palabra: miedo. Miedo a la brutal IGNORANCIA. 




Pollo de buitre leonado. 


Palabra: INOCENCIA. 


Dejemos ya de romper equilibrios. No nos podemos imaginar la cantidad de quilómetros que hacen estos bichos diariamente para encontrar alguna res tirada por el campo.  Desgraciadamente no todos los días tienen suerte. 


No hace falta decir nada al respecto de la mirada de esta culebrera. Pregunta: ¿Realmente alguien puede ver esta mirada sin inmutarse? Sin sentir el más mínimo respeto hacia esta preciosidad?




No, no es una pintura. Estos dos pollos de águila calzada son reales.

Pregunta: ¿De verdad creéis que no existe la perfección? Para mí son perfectos. Son verdaderas maravillas de la naturaleza que debemos admirar, respetar y, como el desequilibrio es por nuestra culpa, debemos ayudar.




De la misma manera, esta mariposa me parece perfectamente bella. 

¿Podéis encontrarle algún fallo estético? Porque yo no...




Con poco que haga, me sentiré orgullosa si ando por la vida arrancando nuevos sentimientos a gente insensible con el entorno aún sabiendo que no se puede hacer cambiar a una persona (ADULTA).